Siguiendo uno de los objetivos de nuestro Grupo, fomentar y difundir la gnomónica en la sociedad, se han producido unas actividades de colaboración con el Módulo de Cantería de la Escuela-Taller AL-HASSA, que durante dos años -diciembre de 2002 a diciembre de 2004- y promovida por la Gerencia de Urbanismo ha estado ubicada en las Caballerizas Reales de Córdoba, junto al Alcázar de los Reyes Cristianos. Estas actividades han sido posibles porque mi hermano Marcos ha sido el monitor encargado del curso impartido en este Módulo de Cantería, y de ese modo hemos podido incluirlas como parte de sus planes de prácticas.
En este proyecto han participado algunos alumnos de dicho Módulo, y se ha desarrollado en dos etapas bien diferenciadas: en un principio se les dieron algunas nociones muy elementales sobre gnomónica y se les instruyó sobre los métodos geométricos de trazado de los relojes solares más simples, que son los horizontales, verticales y ecuatoriales, y en la segunda fase y dentro de sus planes de formación y capacitación en el trabajo de la piedra, les facilitamos los diseños y las directrices para que procedieran a la realización práctica y material de dos relojes de sol, uno horizontal y otro ecuatorial excavado, teniendo en cuenta, claro, que no fueran piezas con una excesiva complicación.
Antes de describir los relojes presentemos a los dos alumnos con sus respectivas piezas. Antonio Igorra Cruz es el artífice del reloj horizontal que vemos en la fotografía de la izquierda, y en la imagen derecha vemos a Sahib Córdoba Galbán, que se encargó de realizar el reloj ecuatorial:
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Y ahora sí, pasemos a comentar los relojes. El reloj horizontal mide 40 ctms. de altura, 40 ctms. de anchura y 6 ctms de espesor. Esta realizado en piedra natural (arenisca de Posadas) tallada a mano. La forma del dibujo está inspirada en estilo gótico y ha sido rebajada a una profundidad de 1 ctm. y rellenada después con un estuco compuesto por una mezcla de cal y piedra pulverizada en granulometría fina, tanto la parte de color negro como la de color rojo. El gnomon es una varilla de acero de 3 mms. de diámetro, tratada con un barniz especial para metales con el fin de evitar su oxidación. Los números están estampados artesanalmente en latón, envejecidos y protegidos con barniz. Las señales horarias están hechas mediante una técnica de esgrafiado, y toda la pieza ha sido tratada con un hidrofugante para impedir su deterioro y la habitual aparición de verdín. Indica la hora local de Córdoba.
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El reloj ecuatorial mide 40 x 40 x 50 ctms y asimismo está tallado a mano en piedra natural, también arenisca de Posadas. Como elementos ornamentales lleva dos hojas de higuera en los costados, y el año de construcción en la parte superior y trasera. Los números están estampados artesanalmente en chapa de cobre, envejecidos y barnizados. Las señales horarias están formadas por un doble alambre de acero, retorcido, envejecido y tratado con barniz especial para metales para evitar la oxidación. El gnomon consiste en las mismas aristas del instrumento. Los que conozcan el libro de Pedro Roiz -los que no lo conozcan y estén interesados pueden mirar en la Bibliografía- se habrán dado cuenta que este reloj está inspirado en uno similar descrito en dicha obra en la pág. 94, en el capítulo dedicado a los relojes equinocciales.
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Estos relojes de sol son propiedad de los alumnos que los han elaborado y se ubicarán definitivamente en sendas casas de campo.
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